EVITA PERÓN: "NOS SOBRAN ALCAHUETES Y
NOS FALTAN REVOLUCIONARIOS"
Cafiero que
fue un joven ministro del segundo gobierno de Perón contó una anécdota con Evita
que sucedió cuando ella se encontraba enferma y guardaba cama gran parte
del tiempo. Alguien le había dicho erróneamente al ministro que Perón
vería con buenos ojos que designara al Coronel Benito Bernalcázar en algún
puesto dependiente de su ministerio por lo que lo designó en la Junta Nacional de
Carnes.
Eva lo mandó
a llamar a la Residencia y lo encaró duramente porque era contraria a esa
designación acusando al coronel de traidor y también le advierte, sabiendo los
vínculos de Cafiero con la Iglesia, que sus amigos clericales andaban
conspirando contra el gobierno, aunque Cafiero no lo dice es posible que este
cuestionamiento también haya sido una advertencia para el mismo ministro.
Eva le
disparó la siguiente contundente frase: “¿Se acuerda que le dije de mi
esperanza en usted y en los jóvenes? No se equivoque, Cafiero usted es uno de
esos jóvenes. No quisiera que me defraude…”.
El ministro
intentó explicar que el designado era cercano a Perón y Eva lo cortó diciendo:
“-Cercano, nada, Cafiero. ¿Sabe cuántos traidores hay al lado de Perón? ¿O
usted no sabe que nos sobran alcahuetes y nos faltan revolucionarios?
Usted es joven, pero no es tonto ¿Sabe usted lo que significa lealtad?”.
Luego
continuó con un párrafo que podríamos considerar profético: “-¿Sabe lo que yo
sería capaz de hacer por Perón? Ahora mismo, mandaría al diablo a los médicos
que no me curan y me iría de rodillas a Luján a rezar por el General. Porque él
es la única esperanza de este pueblo. La única razón de ser de los pobres y
humildes de la Patria. Sin él, los oligarcas y los vendepatrias
van a vivir la hora de la venganza. Acuérdese de lo que le estoy diciendo.
Usted lo va a ver y yo no. Esa es mi única tristeza”.
El golpe de
estado de 1955 le dio la razón, a continuación le mostró parte del escrito que
se conocería como “Mi mensaje”, como mucho después de su muerte se dudó sobre
la veracidad de este texto, esta mención de Cafiero confirma su existencia.
Al mostrarle
ese trabajo le dijo: “-Vea, estoy escribiendo algunas cosas antes de morir para
advertir al pueblo los días que vienen y los peligros que corren…”.
Cafiero
reflexionó: “Adiviné su escritura despareja y alterada en cada una de las
hojas. Me leyó textos que me sobresaltaron. Eran muy duros, casi incendiarios,
contra los militares y ciertas jerarquías de la Iglesia”.
Luego de la
reunión Cafiero fue a la casa de sus padres a almorzar, mientras estaba
comiendo recibió una llamada de Eva que se disculpó por haber hablado con bastante
dureza y se disculpó: “-Cafiero, le pido perdón. No he estado bien con usted.
Quiero que sepa que yo soy muy católica. Que tengo tres devociones en mi vida:
la virgen de Luján, el General Perón y los trabajadores argentinos…Pero hay
curas… y hay militares traidores que se dicen peronistas. Ellos están
agazapados a la espera del zarpazo que nos arranque estos años de felicidad…
Nunca se olvide de esto… Sea siempre leal a Perón… La lealtad es el mayor valor
de los peronistas. Por eso, el 17 de octubre, nuestro día, es el Día de la
Lealtad…Comprenda mi enojo… Mi amor por Perón y el pueblo pueden más que
todo…”.
En ese momento rompió en llanto, fue la última vez que
Cafiero habló con ella, que a continuación procedió a suspender la designación
del funcionario cuestionado.
impresionante actualidad
ResponderEliminarYa es hora que lo hagamos realidad
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